En Liniers y por la ida de los cuartos de final, el Fortín igualó 1-1 con el conjunto ecuatoriano. Rodrigo López le dio la ventaja a los de Gareca, mientras que Claudio Bieler puso el empate para los visitantes.
Dentro de este nuevo orden del fútbol sudamericano, Liga de Quito ocupa un lugar de privilegio. Claro está, bien ganado dentro de la cancha, en base a logros y una estructura que predomina como nunca antes lo hizo en otro club ecuatoriano. Hoy, los de Fossati jugaron en Liniers, ante el campeón argentino, Vélez ,y no sólo empataron, sino que hasta pudieron haber ganado.
El previsible aluvión velezano jamás llegó y apenas fue una acumulación de centrodelanteros (llegaron a estar López, Caruso y Zárate juntos) que siempre fueron controlados por los seguros defensores de la Liga.
Entonces, la impotencia de Vélez se transformó en fortaleza de sus visitantes que con el oficio Vera, Calderón y Bieler culminaron por llevar adelante un partido que los deja más que bien parados para meterse en una nueva fase culmine de un certamen continental, donde ya no es sorpresa contarlos.
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